El único imputado por el crimen de Elba Ibáñez, acusado por el delito de «homicidio simple» tiene 77 años y siguió el juicio por videoconferencia.
Dando continuidad al debate que se inició ayer por el crimen de Elba Ibáñez, hoy el Ministerio Público Fiscal, representado por el fiscal Miguel Mauvecín, pidió la pena de 14 años para el único imputado por el crimen Lorenzo «Tito» Quiroga.
Este jueves, el imputado sostuvo, desde Tinogasta y a través de videoconferencia: “Estoy enfermo. Tengo diabetes, hipertensión, problemas de próstata y artritis. No puedo caminar. Me muevo en silla de ruedas”.
En cuanto a su declaración, se basó en una primera instancia, ya que ayer se había abstenido de hacerlo en su derecho permitido, por lo que se procedió a dar lectura la declaración que había manifestado durante la etapa de investigación.
En aquella oportunidad, Quiroga reconoció que conocía a Elba desde hacía 12 años. Se habían conocido en un ambiente laboral y lograron forjar una amistad. En marzo de 2019, ella llamó a “Tito” para que “le haga ‘un trabajo’”. “Quería terminar con un embarazo. Le dije que no, que no hacía eso. Ella no podía hacerse cargo de otro hijo. Ella insistía; llamaba reiteradamente”, aseguró.
Ante esta situación, Quiroga había pensado en ir al hospital de su comunidad pero no sabía qué iba a decir. Decidió llevarla al lugar donde la encontró, cerca de la casa de la joven. Luego, pensó en llevarla a la Comisaría.
Por último, decidió dejarla en un canal, como si estuviera sentada. “La dejé afirmada en uno de los muros del canal”. Después se fue a su casa. “Sentí cargo de conciencia y culpa. No pude dormir. En ningún momento maltraté ni golpeé a Elba; no le pegué en ninguna parte del cuerpo ni la estrangulé. Solamente la asistí y le di la ayuda que ella tanto insistió”, había declarado. Según Quiroga, con Elba tenía una “relación afectiva” y “lamentó lo ocurrido”.
Testigos
En la ronda de testigos, el hijo de Elba y una hermana de ella dieron algunos detalles sobre su trágica muerte. La primera en declarar fue la hermana de Elba. “No sabía que estaba embarazada. Era muy reservada”, aseguró.
“A mis sobrinos les destruyó la vida económica y emocionalmente. La familia tuvo que pagar psicólogos; los abuelos maternos ayudan. Este señor destruyó nuestra vida, en todo sentido”, aseguró.
El último testimonio fue el del hijo mayor de Elba, un joven de 22 años. “Me levanté y no la encontramos. Empezamos a buscarla. Nos pareció extraño que no haya llevado a la escuela a mi hermanita”, recordó. Fueron a dar aviso a la Policía. Por entonces, ya se sabía que una mujer había aparecido una canal. Su familia aún no sabía que era Elba. “Fue muy grande el dolor”, expresó. “Salí del Instituto y vi a mi madre por última vez porque no la vi cuando salió”, contó.
Quiroga, de 77 años, está imputado por el delito de “Homicidio Simple”. Es el único acusado por el crimen de Elba Ibáñez, ocurrido en marzo de 2019, en Fiambalá.
Recordemos que el Tribunal está integrado por los jueces Jorge Palacios, Marcelo Soria y Patricia Olmi. El Ministerio Público Fiscal es representado por el fiscal Miguel Mauvecín, quien está acompañado por los abogados de la querella Sebastián Ibáñez y Bruno Jerez. La defensa es ejercida por el abogado del foro local Roberto Mazzucco.
