Continúa la fiebre bancaria: UBS compra a su rival Credit Suisse
El Banco Suizo UBS anunció ayer que adquirirá a su rival Credit Suisse por 3.000 millones de francos suizos (USD3.200 millones de dólares).
Esta transacción se da en el marco global de crisis bancaria mundial que comenzó con la caída de Silicon Valley Bank en Estados Unidos y la respuesta inmediata de la Reserva Federal (FED) que, si bien no salvó a la entidadse su caída, sí aseguró a sus depositantes que no perderían su dinero.
Como explica Lara López, economista, «el sistema financiero es similar a un grupo de personas en el que hay quienes hacen las cosas bien y otros que hacen las cosas mal. Debido a los que hacen las cosas mal, es muy factible que se produzca un contagio al resto». Esta analogía explica por qué la FED tomó intervención inmediata para evitar este «contagio».
Ahora respecto a lo sucedido en Suiza, para entender la transacción realizada entre los bancos rivales, primero hay que diferenciar los problemas de liquidez de los de solvencia.
En el primer caso, los fondos existen pero no están disponibles. Por lo que se toma deuda para cubrir el gasto que luego es saldado al contar con el monto de dinero disponible. El banco cuenta con los medios para enfrentar sus obligaciones, por ejemplo la salida de depósitos, pero en el momento no tiene el dinero disponible. Este problema se soluciona fácilmente con un crédito que se salda una vez solucionado el descalce de plazos.
La insolvencia es otra cosa. Es un problema estructural. En concreto se trata del gasto por encima de lo que se tiene de manera sistemática. En este caso los créditos no se consiguen por lo que no hay manera de salvar a la entidad insolvente.
UBS compra a Credit Suisse para volver a restablecer la confianza en el sistema financiero y evitar el propio riesgo de una corrida bancaria. Lo que sorprende es que lo hace por la mitad de su cotización del pasado viernes. Inevitable preguntarse por qué Credit Suisse acepta un monto tan por debajo de su precio real.
Se puede deducir claramente que la entidad bancaria está sufriendo un problema de liquidez, pero además, está transitando un problema estructural, de solvencia, insalvable.
Esta tendencia que comenzó con el Silicon Valey Bank en Estados Unidos, empieza a visibilizar el estado de otros bancos en el resto del mundo que se enuentran apalancados y que cuando «baja la marea» quedan expuestos como en este caso. Se genera el famoso «efecto dominó».
¿Cómo afecta esto a Argentina?
El Merval desde el 10 de marzo cayó un 13% y el dólar MEP subió de $377 a $391, por lo que la recomendación es moverse con cautela. Con las inversiones en bolsa ,por ejemplo, hay que extremar la cautela, debido al estado de sequía, al año electoral y a este factor internacional proveniente del sistema financiero mundial.